miércoles, 13 de febrero de 2013

¿A dónde va uno a curarse el rencor?


¿A dónde va uno a curarse el rencor?

Tengo un dolor niño, niño es porque no sabe, porque no discrimina, porque crece. Tengo un dolor niño adherido a la piel, un dolor líquido que me pasa por toda la sangre y las lágrimas, un dolor tan mío que no lo puedo separar de mí.

Vuelve el viejo dilema, de si sería más sencillo poderlo olvidar todo, deshacerse en una palabra, hacer una perfecta discriminación de los recuerdos que uno quiere guardar. Pero son ilusiones, (mis ilusiones también son niñas porque son demasiado ingenuas, demasiado entusiastas y también demasiado tiernas).

Necesito unas pastillas que sanen la ausencia, unas inyecciones fuertes para que se me cure el recuerdo, para que mi cabeza no regrese a recrear los espacios que fueron nuestros, las calles que recorríamos, las películas que vimos, los libros que leímos, las cosas nuevas que descubrimos, la gente que conocimos, las cosas tan sinceras que nos decíamos, y todo, todo, no sólo lo que éramos sino lo que era yo cuando era a su lado.

Y si tuviera sólo dolor, pero no… Tengo rencor y me estoy pudriendo de no poder superar la pérdida voluntaria. Sería tan fácil si estuviera muerto, si en mis oraciones el dios escuchara que no quiero que se haga su voluntad omnisciente sino la mía, que quiero que el mundo se adapte a mis deseos, que quiero que él no exista más porque me lastima su desprecio. He tenido que ser fuerte, fuerte o necia, y alejarlo de mi vida porque no he podido aceptar que ya no me quiera, que ya no me busque, que ya no me necesite, he tenido que hacerme a la idea de que se terminó y que hay que dejar ir. Pero dejar ir no quiere decir dejar ir el dolor.

Y lo pienso una y otra vez… que sería tan fácil si estuviera muerto.

Sé, oscuramente, que la solución no es olvidar, porque olvidarlo sería olvidar la mitad de lo que yo soy. ¿Cómo se reconstruye uno después de tal escisión? ¿Cómo le hace uno para seguir adelante cuando la persona que supiste siempre estaría a tu lado, de manera incondicional, de pronto decide suplantar tu lugar con alguien más? Pues uno se consigue gente nueva, dirán, experiencias nuevas, se va uniendo de nuevo a otras personas y rehace los sentimientos…

Pero yo no quiero un nuevo rencor. Me mató el amor que había en mí. Me destruyó por completo. Y ahora ¿qué hago?, ¿cómo me dispongo a querer a alguien más? Cómo me dispongo a hacerme otra yo sin que él siga siendo en mi vida?

Y repito, ¿a dónde va uno a curarse el rencor?


Music on: Videotape - Radiohead
Quote: Hay que ser alegres, no a pesar de que el mundo es irracional, sino porque el mundo es irracional
Reading: El malentendido - Albert Camus

jueves, 7 de febrero de 2013

No es que deje de doler



No es que deje de doler. Pero a veces el orgullo y el rencor y el odio son más grandes que cualquier dolor existente. Cuando uno odia y tiene rencor y está enojado con el mundo, tampoco se puede ser racional. No pido que me entienda nadie, me es suficiente con entenderme yo. Pero es cierto, hay dolores que no se pasan tan pronto, hay ausencias que no se curan en quién sabe cuánto tiempo, porque mientras uno no sienta no odio sino indiferencia, podrá seguir adelante en la vida.

Me detiene el odio, me detiene la falta de comprensión, me detiene la maldita nostalgia y saber que el futuro brillante no está como lo había planeado, pues se derrumbó sin avisar, pero bueno, eso les pasa a todos. Como decía el poeta, espero curarme de ti en unos días, y lo he estado haciendo, sólo que a veces es bien difícil mirar sólo hacia adelante, porque el peso del recuerdo es como una hermosísima Eurídice que cuida mi espalda y a la cual tan sólo quiero poseer.

Así es como es. Me duele, sí, te digo que te odio, por aquí nada más, porque mi orgullo no me permite decírtelo de frente, ni siquiera por internet, en un chat, en la distancia más declarada posible. Dije que no te hablaría más y eso hago, pero reconozco que me duele y que mi irracionalidad no me permite sino odiarte, porque de alguna forma tu ausencia me daña y no encuentro la manera de reparar el hueco, porque seguramente no hay manera de reparar el hueco.

Escribo, al fin, cosas que se quedan en el anonimato, en el todo y la nada de la web, donde quizá me leas, quizá no, donde quizá esto y lo otro... o no.


Music on: Cosmic love - Florence and the machine
Quote: "una vez que has entregado el alma, lo demás sigue con absoluta certeza, aún en pleno caos" Henry Miller 
Reading: La peste - Albert Camus