Es tan corto el amor y tan largo el olvido
Neruda
Tengo demasiado corazón para amar a muchos... pero sólo te quiero amar a ti. Y me guardo las palabras porque el tiempo de decir se ha ido, me abandonó como me han abandonado mis tristes esperanzas.
Siento que ya es demasiado tarde también para existir, para actuar y para cualquier cosa, más para decirte que te amo, para pedirte otra oportunidad. Te sueño de día y de noche y recreo tus besos dulces en mi cuello, mi respiracón tibia en tu boca y mi beso perfecto en los extremos de tus labios. Te sueño y espero que de pronto te me aparezcas en el camino, con tu mochila al costado, tus lentes y tus manos frías, y sólo eres un sueño ya, uno muy triste.
No sabes cuánto me duele el arrepentimiento que pesa en mis párpados cada que te miro y tus ojos jamás buscan los míos. Ya sé que soy una sombra amorfa en tu vida, una pesadilla; pero es que yo no puedo deshacerme de ti ni dejar de verte ni dejar de esperar eternidades por un beso, sólo un beso.
Es muy tarde para todo, y no importan mis heridas abiertas ni mi angustia constante, no importa que me duelas, que me duela cada gota de sangre. Es demasiado tarde, lo sé, tarde para la redención, para el perdón y el olvido, muy tarde para curarme del accidente de tu amor.
Neruda
Tengo demasiado corazón para amar a muchos... pero sólo te quiero amar a ti. Y me guardo las palabras porque el tiempo de decir se ha ido, me abandonó como me han abandonado mis tristes esperanzas.
Siento que ya es demasiado tarde también para existir, para actuar y para cualquier cosa, más para decirte que te amo, para pedirte otra oportunidad. Te sueño de día y de noche y recreo tus besos dulces en mi cuello, mi respiracón tibia en tu boca y mi beso perfecto en los extremos de tus labios. Te sueño y espero que de pronto te me aparezcas en el camino, con tu mochila al costado, tus lentes y tus manos frías, y sólo eres un sueño ya, uno muy triste.
No sabes cuánto me duele el arrepentimiento que pesa en mis párpados cada que te miro y tus ojos jamás buscan los míos. Ya sé que soy una sombra amorfa en tu vida, una pesadilla; pero es que yo no puedo deshacerme de ti ni dejar de verte ni dejar de esperar eternidades por un beso, sólo un beso.
Es muy tarde para todo, y no importan mis heridas abiertas ni mi angustia constante, no importa que me duelas, que me duela cada gota de sangre. Es demasiado tarde, lo sé, tarde para la redención, para el perdón y el olvido, muy tarde para curarme del accidente de tu amor.
1 comentario:
Esta entrada y la pasada son increíbles, no puedo entenderlas del todo porque mi estado amoroso no concuerda, pero lo siento tan vivo con lo que he pasado que puedo imaginar uno a uno los pasos que recrean estas historias de nostalgia, de deseo, de frustración, de amor. Y si el amor es realmente una enfermedad de transmisión sexual? puede ser y sigue el patrón de las mismas, algunos sólo son portadores mientras a otros les cambia la vida por completo y los más afortunados nunca llegan a padecerlo.
Puedes sentirte tranquila, no es que no te hayas cuidado bien, seguro pusiste condón a tu corazón, simplemente se rompió y alguien te contagió, dejó en ti el virus y sanó de esa enfermedad, hay alguna culpa en querer sanar?
Gracias por escribir!
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