Escuchábamos
a The National juntos, pero a distancia, así como hicimos tantísimas cosas,
nada más por whatsapp...
No se me
olvida. No se me olvidan los poemas, las horas pegadas al celular, las pláticas
interminables, los buenos días, las buenas noches. No se me olvida la música.
En especial esto, todas las canciones compartidas, que porque fueron compartidas
una vez lo siguen siendo, a pesar de todo.
Pero tampoco
se me olvida el dolor, no se me olvidan esos minutos terribles en que el
corazón me dolió tanto, esas horas de incomprensión, de insultos, de tristeza y
de hartazgo.
Y tampoco
se me olvida el amor, porque amor, de eso, sí que teníamos, estoy segura de que
fue amor, aunque el amor al final haya sido nada. Eso que se puede juntar en
una semana, arrojar a la chimenea y prenderle fuego (Sabines participa en la frase),
eso que es sólo una bomba que dejamos en
la puerta de la paletería para que llovieran chispas de fresa (Alejandro
Páez Varela participa en la frase).
Escuchábamos
A reasonable man, y yo te quería, mi sabor a sal, a trigo, a miel entre
las veredas de la carne. Y tú estabas convencido 100% de aquellas cosas que canta
Matt Berninger: “A quiet love is better than none. A careful heart is better than
none.”
Y yo
escribo cosas para que las leas y ya no sé si lo haces. No se me olvida que no
quise responder tu último mensaje, no porque no lo deseara, no porque con todo
mi ser deseara volverte a abrir la puerta y escucharte y leerte y acercarte. Sino
porque justo eso, abrir la puerta, iba a convertirse en ese dejar pasar de
nuevo la destrucción. Y no vale la pena el dolor que siempre iba a llegar,
quizá tardaría, quizá se escondería entre más canciones, más palabras lindas,
más detalles de esos que enamoran, pero siempre, siempre vendría el
apocalipsis, porque realmente no podemos hacer otra cosa tú y yo más que arder
y arder y quemarnos hasta destrozarnos.
En fin, que
escucho a The National. Sé que vendrán a dar un concierto y te pienso, pero ya no
eres tú, nacieron cansados, nuestro largo amor y
nuestros breves amores (Bonifaz nuño
participa en la frase). Y todo lo que pienso sobre ti termina en el vacío
porque no importa, porque fuimos nada, aunque pudimos haber sido todo, tenerlo
todo. Y no olvido y lloro.
Al final
sé que no serías capaz de ir a un concierto conmigo, al final enviarías una
canción como "Please don’t tell her" o "This year’s love" o "Fake plastic trees" o "Let her go". Y ahí acabaría… O tal vez no, porque te pienso y no sé cuántos años
tienen que pasar, cuántos 15 de enero tienen que seguirme en esta vida sin que
te piense o te sueñe (te soñé apenas, por cierto), aunque no te escriba y sólo
vea las veces que cambias de teléfono y revise nuestros escasos archivos compartidos…
En fin, que como ves no se cumplió la premisa de que este amor deberá durar
(David Gray participa en la frase). Y aquí ando, con muchas palabras que no me
atrevo a decirte más que aquí, en este limbo que ha sido mi escaparate y mi
lugar seguro, desgraciadamente.
¿Escucharías
conmigo About today?